¿Puedo abortar estando con anemia? ¿Qué riesgos hay si me lo practico en este estado? ¿El aborto causa anemia? En este artículo vamos a responderte a todas esas preguntas. Recuerda que si tienes más, puedes plantearlas en la sección de comentarios.
La anemia es una condición en la que existe una disminución de los glóbulos rojos en la sangre, los cuales son los encargados del transporte de oxigeno a todo el cuerpo a través de una proteína llamada hemoglobina. Existen muchas causas por las que alguien puede tener anemia; entre ellas sangrados, deficiencia de hierro en la dieta, tener parasitos, etc. Teniendo en cuenta que durante un aborto se produce sangrado, es una enfermedad que tenemos que tener en cuenta a la hora de practicarlo.
La anemia usualmente se manifiesta como palidez en la piel y mucosas, puedes además presentar otros síntomas dependiendo de la severidad de la anemia, por ejemplo: palpitaciones, cansancio, agitación con esfuerzos pequeños, mareos, taquicardia e incluso desmayos.
La forma para saber si se tiene anemia es realizar una biometria hemática, que consiste en una toma de sangre para medir el contenido de hemoglobina en la misma (normal 12-15 gr/dL). Antes de realizar cualquier procedimiento quirúrgico, el médico te va a pedir una biometria hemática para ver si existe anemia o no. Por eso es importante no intentar provocarse un aborto en casa y sí acudir a una clínica en la que comprobarán si tienes anemia o no antes de interrumpir el embarazo.

Es importante comprobar si tienes anemia antes de abortar
Toda pérdida de sangre en las pacientes con anemia puede empeorar los síntomas, dependiendo de la cantidad de sangrado. En casos graves puede llevar al choque y muerte. Por eso, es muy importante la valoración antes de realizar el procedimiento por ginecólogos en una clínica ILE.
Cabe mencionar que las pacientes más pequeñas y delgadas son mas propensas a verse afectadas por la pérdida de sangre, ya que la cantidad de sangre del cuerpo depende del peso. En estas pacientes pueden empeorar los síntomas más fácilmente.
En el caso especifico de un aborto hay dos opciones de tratamiento: médico (solo con pastillas) o quirúrgico (legrado o aspiración). Es importante mencionar que ya sea médico o quirúrgico, el sangrado esperado durante el tratamiento suele ser poco. Tener anemia leve o moderada, por lo tanto, no sería una contraindicación para ninguno de estos tratamientos.
Se puede abortar teniendo anemia, pero se recomienda control médico al realizar la interrupción del embarazo en una clínica ILE
El tipo de tratamiento depende de las semanas de gestación, pacientes con embarazos menores de 8 semanas son candidatas a tratamiento médico. Este tipo de tratamiento se realiza en casa, sin necesidad de estar hospitalizada. Menos del 1% de estas pacientes presentan sangrado severo y llegan a requerir transfusiones sanguíneas. Este tratamiento no te lo servirán en ninguna clínica clandestina.
En el caso del tratamiento quirúrgico se reserva para los embarazos más grandes o en caso de que falle el tratamiento médico. De igual forma el porcentaje de pacientes que presentan sangrado importante es menor al 1%. El periodo de tiempo que se esta en el hospital puede ser de entre 4-8 hrs. Las pacientes identificadas con anemia leve o moderada deben recibir hierro vía oral después del aborto por al menos tres meses y lo más importante identificar la causa inicial de la anemia para poder tratarla.
Las pacientes con anemia severa (hemoglobina < 9 gr/dL), requieren una preparación previa a realizar el procedimiento. Esta preparación se inicia entre 1-2 días antes del procedimiento. En estos casos se debe considerar la aplicación de hierro a través de la vena o incluso una transfusión sanguínea previa al procedimiento.

Una vez se identifica el grado de anemia se puede corregir el problema de cara al aborto
En este último caso, podría ser posible requerir hospitalización para vigilancia unos días después del procedimiento, pero va a depender de la cantidad de sangrado y del estado de la paciente después del mismo.
Un caso especial son las pacientes que llegan ya con sangrado importante a consecuencia de un aborto (provocado o no). En estas paciente el sangrado agudo puede ser la causa directa de la anemia y por lo tanto requiere el tratamiento quirúrgico inmediato para detener el sangrado. En este caso una vez que se detiene el sangrado se puede considerar la transfusión.
Después de realizar el aborto, es normal continuar con sangrado durante algunos días, este generalmente es menor que el de una menstruación. Por lo regular dura 5-7 días y no suele empeorar la situación de la anemia. Si el sangrado fuera abundante o durará mas de lo normal se debe buscar asistencia médica.
Provocarse un aborto casero con anemia es todavía más peligroso. No recurras a remedios caseros nunca
También es posible que una paciente previamente sana, desarrolle anemia después de un aborto, si durante el tratamiento se presenta un sangrado mayor al habitual. Se debe también tomar hierro durante al menos 3 meses y casos especiales se podría llegar a necesitar una transfusión.
La mejor forma para prevenir la anemia es llevar una alimentación adecuada, los alimentos ricos en hierro son las plantas verdes, la carne roja, hígado, huevo y algunos cereales fortificados. Otras medidas son desparasitarse cada 6 meses y acudir al menos una vez al año a un chequeo médico.
Si estas embarazada y buscas la interrupción legal del embarazo, es muy importante la valoración por un profesional capacitado antes de llevar a cabo el procedimiento. Esto permite no solo descartar la presencia de anemia, si no también de otras posibles complicaciones como un embarazo ectópico.
Realizar el procedimiento con un médico capacitado, evitar automedicarse y mantenerse bien informado, reducen las posibilidades de complicaciones no solo en caso de que tengas anemia. Cuidar tu salud es lo más importante.