El embarazo es un estado en el cual el cuerpo tiene una serie de modificaciones para permitir el crecimiento de una nueva vida. Algunos de estos cambios pueden hacer a mamá más propensa a infecciones.
Entre las infecciones más comunes que presentan las mujeres embarazadas están las infecciones de vías urinarias y las infecciones cervicovaginales. De las infecciones de vías urinarias dos son las más importantes cistitis (infección de la vejiga) y pielonefritis (infecciones renal), ambas se asocian a parto pretermino y complicaciones perinatales.
Las mujeres embarazadas son más propensas a tener bacteriuria asintomática persistente (presencia de bacterias en orina), esto hace que presenten infecciones con mayor frecuencia que las mujeres no embarazadas. En las mujeres no embarazadas las bacterias son eliminadas más eficazmente del cuerpo por los mecanismos de defensa.
¿Qué infecciones se dan en el embarazo?
Lo anterior se debe a tres cambios que suceden de manera natural durante el embarazo. El primero es un estado de inmunosupresión que sirve para que la madre acepte al feto, un feto nunca es genéticamente igual a su madre, por lo que el cuerpo tiene un cambio en sus defensas para no atacar al feto como cuerpo extraño. Es similar a aceptar un órgano donado.
El segundo cambio lo provoca la progesterona, una hormona que durante el embarazo tiene como principal función evitar que el útero presente contracciones antes de tiempo. Sin embargo actúa sobre todos los órganos con músculo liso como los intestinos y los ureteros.

¿Cómo eliminar una infección vaginal durante el embarazo?
Por eso las mujeres embarazadas sufren de estreñimiento y sus ureteros presentan dilatación. La dilatación de los ureteros genera estasis y estancamiento de la orina, haciéndolas más propensas a infecciones renales. El tercer cambio es que el peso del útero gestante sobre la vejiga puede condicionar vaciamientos incompletos lo que puede provocar cistitis.
Todas las infecciones de vías urinarias en las mujeres embarazadas, incluso la presencia de bacterias sin síntomas en orina, por el riesgo de complicaciones. Las infecciones renales (pielonefritis) se deben tratar como complicadas y requieren antibióticos intravenosos en un medio hospitalario.
Síntomas y tratamiento de las infecciones urinarias en el embarazo
Durante las consultas con el ginecólogo se debe siempre preguntar por la presencia de molestias urinarias como dolor o ardor al orinar, mal olor en la orina o que ésta sea muy concentrada. Se debe solicitar de manera rutinaria examen general de orina en la primera consulta.
Las infecciones vaginales también son más comunes, éstas se presentan por los cambio en el pH, por la dificultad para el aseo y por la inmunosupresión. Las más frecuentes son las ocasionadas por un hongo oportunista que vive en la piel llamado Candida albicans.
Los síntomas son flujo blanquecino, espeso y comezón. Si se presentan estos síntomas es importante avisar a tu médico para recibir tratamiento adecuado. Si el flujo es amarillo-verdoso, gris y mal oliente, la infección es probablemente secundaria a una bacteria.
El médico debe revisar las características del flujo para dar el tratamiento más adecuado. Y en el caso de las embarazadas es importante tomar un cultivo cervicovaginal o urinario, según sea el caso, para determinar con certeza que se erradicó la infección.
Otras infecciones no es que sean más comunes en las embarazadas, si no que es más fácil el contagio, por ejemplo las virales. Si se está embarazada y se va a estar cerca de un enfermo, sería buena idea tener más precauciones como lavarse las manos después de visitarlo, desinfectar superficies, usar cubrebocas, etc.
Riesgos que provocan las infecciones durante el embarazo
Hay algunas infecciones que en el embarazo pueden tener complicaciones graves para el feto y la madre. Por ejemplo la influenza, su presentación en el embarazo suele ser más grave, es recomendable aplicar la vacuna.
Las mujeres no vacunadas o que jamás tuvieron sarampión, varicela, rubeola y otras exantemáticas, deben evitar el contacto con enfermos. Si se está en contacto con pacientes infectados se debe avisar a tu médico de manera inmediata. Si se va a viajar a zonas de riesgo para enfermedades como el Zika se deben tener precauciones especificas.
Las pacientes con enfermedades previas al embarazo como las diabéticas que tienen mayor riesgo de infección ameritan cuidados preventivos especiales durante el embarazo. En estas pacientes la búsqueda intencionada de infecciones debe ser rutinaria.
Otro punto importante es completar tu esquema de vacunación y acudir al dentista antes de planear un embarazo. Las infecciones dentales también se asocian a parto pretermino. Si no se hizo antes del embarazo se puede hacer durante el mismo.
Ninguna infección durante el embarazo debe pasar sin tratamiento médico específico, toda infección complicada puede aumentar el riesgo de complicaciones. Informarse de los riesgo específicos en tu comunidad y avisa a tu médico en caso de infección es muy importante.