La sífilis es una infección bacteriana común que se contagia a través de las relaciones sexuales sin protección. La bacteria responsable de la transmisión de la sífilis es la la espiroqueta treponema pallidum. Es una enfermedad que puede curarse de forma sencilla, pero de no recibir tratamiento puede provocar daños permanentes.
La sífilis provoca llagas genitales, conocidas como chancros. Estas llagas no son dolorosas, pero pueden propagar fácilmente la enfermedad.

En México, según el Boletín Epidemiológico de la Secretaría de Salud, en el 2018 se detectaron 3533 casos en hombres y 2170 en mujeres. Por su parte la OMS estimó que tan solo en el 2016 más de 988 000 mujeres embarazadas contrajeron la sífilis, lo cual dio lugar a más de 200 000 muertes fetales y recién nacidos.
Síntomas de la Sífilis
Los síntomas del sífilis a veces son tan leves que pueden pasar inadvertidos, esto hace que sea una enfermedad tan común pues las personas no saben que la tienen y siguen transmitiéndola. A esta fase asintomática de la enfermedad se le conoce como etapa latente.
Los signos de la sífilis pueden aparecer y desaparecer de forma periódica, por lo que es importante hacerte pruebas de ETS regulares si mantienes relaciones sin protección. Las etapas sintomáticas de la sífilis se dividen en la primaria, secundaria y tardía.
Etapa primaria: El primer síntoma es la aparición de una llaga o úlcera, llamada «chancro» en la parte del cuerpo que entró en contacto con la bacteria, puede aparecer en la vulva, vagina, ano, escroto y en casos raros en la boca. Estos síntomas pueden ser difíciles de detectar porque por lo general no causan dolor y, en ocasiones, ocurren en el interior del cuerpo.

Los chancros son muy contagiosos y dado que pueden confundirse con un grano o protuberancia inofensiva, no suelen atenderse en esta etapa y su contagio se propaga. El chancro aparece unas semanas después del contagio y desaparece al mes o mes y medio, dando comienzo a la segunda etapa.
Etapa secundaria: Durante esta etapa aparecerá una erupción en varias partes o en todo el cuerpo, como un sarpullido o manchas rosáceas que no duelen, suelen aparecer en las palmas de las manos o plantas de los pies, o en otras partes del cuerpo.
Otros síntomas que se pueden sentir son fiebre leve, dolor de cabeza, inflamación de los ganglios linfáticos, cansancio, dolor de garganta y pérdida de peso o del cabello. Esta etapa dura aproximadamente un año, la persona experimentará la aparición y desaparición de los síntomas constantemente, como se parecen a los síntomas de otras enfermedades suelen pasar desapercibidos.
Etapa terciaria: Entre la segunda y tercera etapa pueden haber periodos en que la infección esté sin síntomas, es decir en etapa latente, esto puede durar meses o incluso años sin ningún síntoma de sífilis. La etapa tardía es la más grave, ocurriría entre 10 a 30 años desde que comenzó la infección. Provocará daños musculares como parálisis y entumecimiento, ceguera y demencia. También hay daños en múltiples órganos internos y puede causar la muerte.

Prevencion para no contagiarse de Sifilis
La principal vía de contagio de la sífilis son las relaciones sexuales sin protección con una persona contagiada. Esta enfermedad se contagia mediante relaciones por vía anal, vaginal u oral, incluso si no hay eyaculación.
El uso del preservativo durante el sexo reduce significativamente el riesgo de contraer sífilis, sin embargo, el roce de la piel con la zona contagiada puede provocar el contagio.
La otra estrategia para protegerte es realizarte pruebas frecuentes de ETS y pedir a tus parejas que lo hagan también. Con esto te asegurarás de mantener tu salud óptima, de diagnosticar una ETS a tiempo y de evitar la propagación del contagio.
Ante la confirmación de tener sífilis, es indispensable que se lo comuniques a las parejas sexuales que hayas tenido. Es importante que no mantengas ninguna relación sexual hasta que no recibas tratamiento y que tus parejas anteriores o actuales tampoco lo hagan.
Tratamiento de la Sífilis
Lo ideal es que acudas con tu médico desde la aparición del primer síntoma. Sin embargo esta enfermedad puede tratarse en cualquiera de sus etapas, la desventaja de tratarla en estados más avanzados obviamente es que los daños que haya generado pueden ser irreversibles.
El tratamiento para la sífilis es sumamente sencillo, consiste en la aplicación de antibióticos, de una a tres fuertes dosis dependiendo del caso. Es muy importante que tu pareja también reciba tratamiento, de lo contrario pueden volver a contagiarse entre ustedes o contagiar a otras personas.
Es importante que no mantengas relaciones sexuales de ningún tipo hasta que hayas terminado el tratamiento y las llagas se hayan curado completamente. El haberte curado de sífilis no te hace inmune, puedes volver a contagiarte en un futuro si te expones. Mantén relaciones sexuales seguras y hazte pruebas regulares.
Para detectar y tratar la sífilis, puedes acudir a cualquier centro de salud cercano a tu zona, también puedes acudir a una de las clínicas ginecológicas que tenemos en nuestro directorio donde podrás hacerte pruebas para identificar esta u otras ETS. Nunca debes de automedicarte, acude con el médico, no contribuyas a que este tipo de bacterias creen resistencia a los antibióticos que las hagan cincurables o muy difíciles de tratar.
Consecuencias de padecer Sífilis
Como se ha señalado la sífilis tiene cura y su tratamiento es sencillo durante las primeras etapas, sin embargo, de no tratarse puede convertirse en un problema mayor. En las etapas tardías las consecuencias de la sífilis pueden resultar en enfermedades de salud irreversibles, tan graves como ceguera o parálisis.
En el caso de mujeres embarazadas, la sífilis puede transmitirse al bebé durante el embarazo o parto, a esto se le conoce como sífilis congénita. La sífilis congénita puede causar defectos de nacimiento o incluso la muerte del bebé. Todas las mujeres embarazadas deben realizarse la prueba para evitar que esto suceda.
Para mayor información, consulta a tu médico y/o en tu Centro de Planificación Familiar y/o Clínicas de Salud Sexual y Reproductiva.