La gonorrea es una infección de transmisión sexual muy común, se estima que cada año se contagian alrededor de 87.7 millones de personas en el mundo. A largo plazo puede producir problemas como la infertilidad, por eso es importante que reconozcas sus síntomas, para que si los presentas acudas al médico para un tratamiento.
La gonorrea o infección gonocócica, es una enfermedad causada por una bacteria llamada Neisseria gonorrhoeae. Al ser una enfermedad bacteriana es curable, sin embargo, en los últimos años se han reportado casos de “supergonorrea”. Esto quiere decir que el mal uso de los antibióticos ha provocado que la bacteria se hiciera resistente a ellos, teniendo que utilizar tratamientos más potentes.

Para identificar un contagio necesitas realizarte una prueba muy sencilla. El médico podrá mandar hacer un cultivo bacterial tomando una muestra con hisopo de la uretra en el caso de los hombres o un exudado vaginal en las mujeres.
Síntomas de la Gonorrea
La gonorrea no siempre causa síntomas, se estima que 4 de cada 5 mujeres y 1 de cada 10 hombres contagiados desconocen que la padecen, ya que no experimentan molestias. De aquí la importancia de realizarse pruebas de forma periódica.
En caso de que sí tengas síntomas, estos pueden aparecer de 1 a 15 días después del contagio:
- Síntomas de Gonorrea en Mujeres: Aumento de la secreción vaginal, flujo verdoso o amarillento, sangrado entre periodos, dolor al orinar, relaciones sexuales dolorosas.
- Síntomas de Gonorrea en Hombres: Flujo espeso similar a la pus, ardor al orinar, inflamación de los testículos.

Si la infección se dio vía anal, puedes tener descargas anales, dolor anal o perianal. En el 90% de los casos la infección en garganta suele ser asintomática. También puedes presentar síntomas oculares que se manifiestan con secreciones similares a la pus, dolor y sensibilidad a la luz.
Cómo se trasmite la Gonorrea
Puedes contagiarte al tener relaciones sexuales sin protección con una persona que sea portadora. No solo te contagiarías teniendo sexo vaginal, también la puedes contraer teniendo sexo anal (afectando ano) u oral (afectando garganta y ojos). Mujeres embarazadas que no han recibido tratamiento, pueden transmitir la enfermedad a sus hijos al momento del parto.

Para prevenir un contagio por gonorrea es necesario que utilices el condón correctamente. Colocarlo antes de la penetración y retirarlo hasta que se haya terminado la relación sexual. También debes de hacer uso de él durante el sexo oral, o en su caso puedes utilizar una pañoleta de látex especial que se venden para esta práctica sexual.
Tratamiento de la Gonorrea
La gonorrea se puede tratar con antibióticos, de igual forma tu novio/a o parejas sexuales deben de recibir tratamiento. Si no lo hacen y vuelves a tener relaciones sexuales con ellos, volverás a contagiarte. Es muy importante que sigan el tratamiento médico al pie de la letra y que lo terminen a pesar de presentar mejorías, solo así podrán curarse.
El tratamiento consiste en la administración de una sola dosis de antibióticos como ceftriaxona o azitromicina, dependiendo el caso se da el medicamento en pastillas o en inyecciones. También se da un tratamiento durante 15 día para pacientes en los que la enfermedad ya se haya diseminado.
Cuando las personas se automedican y no siguen los tratamientos de forma adecuada, contribuyen a que las bacterias causantes de la gonorrea se hagan resistentes a los tratamientos convencionales. No contribuyas a ello, termina tu tratamiento como lo ha indicado el médico y haz uso del condón.

Gonorrea consecuencias
En el caso de las mujeres, la gonorrea puede afectar las trompas de falopio bloqueándolas e impidiendo que se pueda dar el embarazo, dependiendo del caso, esto puede ser irreversible provocando esterilidad. Si te llegaras a embarazar y sigues sin recibir tratamiento, puede producir abortos espontáneos o parto prematuro. El bebé se contagiará al momento del parto lo que hará que padezca diversos problemas de salud como la ceguera.
En el hombre puede provocar dolor de testículos y también inflamar los epidídimos produciendo bloqueos y por lo tanto infertilidad. En ambos casos la bacteria puede diseminarse a las articulaciones, enfermedad que se conoce como artritis gonocócica.