En México desde hace años las violencias contra las mujeres son parte de la cotidianeidad. Cada día en el país se cometen 9 feminicidios, además de numerosos ataques de violencia física, sexual y de otros tipos contra las mujeres mexicanas. Este año, las mujeres han decidido protestar para exigir un freno a las violencias machistas así como justicia para las víctimas y sus familias.

El feminismo ha ganado impulso en México
Desde hace un par de años, como parte de movimientos globales como el #MeToo, miles de mujeres mexicanas se han sumado a protestas para exigir una vida libre de violencia y respeto a sus derechos. Sin duda, los motivos sobran, pues los feminicidios y ataques contra las mujeres no solo no han disminuido, sino que continúan en aumento y las víctimas y sus familias no encuentran justicia. Además las mujeres siguen teniendo que soportar diferentes tipos de acoso en todo lugar.
El actual gobierno no ha cumplido con la promesa de garantizar la seguridad de sus ciudadanas e incluso el presidente, ha dejado ver la incomodidad que le genera el feminismo y lo ha tachado de ser parte de un complot en su contra.
Las nuevas generaciones de mujeres feministas se han cansado de las buenas maneras y de la indiferencia social y desde 2019 han comenzado protestas que han puesto en evidencia su rabia e indignación. Las feministas mexicanas están dispuestas a pelear y a quemarlo todo para garantizar su dignidad y las de sus congéneres.

Los casos de Ingrid y Fátima han encendido la llama
A este clima de descontento por parte de las mujeres se suman los recientes casos de feminicidios de Ingrid Escamilla y Fátima Aldrighett. Ingrid Escamilla de 25 años fue apuñalada y brutalmente desollada por su pareja. El manejo de los medios, policías e impartidores de justicia puso en evidencia la falta de protocolos, pero sobre todo de sensibilidad y compromiso para atender los feminicidios, esto resulto en un aumento de la indignación y en la movilización de miles de mujeres a lo largo del país.
Un par de días después, se dio a conocer el caso de la pequeña Fátima Aldrighett de 7 años, secuestrada en las inmediaciones de su escuela, cuyo cuerpo fue encontrado con rastros de haber sido torturada y abusada sexualmente.
Ambos casos, conmocionaron a la ciudadanía y pusieron en el centro del debate público los feminicidios, las violencias machistas, la indiferencia social y la incapacidad de las autoridades para dar respuesta a las exigencias de las ciudadanas. Ante este panorama y con la proximidad de la conmemoración del día internacional de la mujer, miles de mujeres se están organizando para exigir igualdad, alto a las violencias y justicia.

El 8 de marzo movilizaciones en todo el país
Con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer colectivas de todo el país han convocado a marchas y movilizaciones en diferentes ciudades. Sumándose al llamado internacional las mujeres mexicanas tomarán las calles. La convocatoria ha sido mayoritaria y con gran respuesta. Hasta el momento se esperan movilizaciones en Ciudad de México, Estado de México (diferentes municipios), Guadalajara, Querétaro, Monterrey, Ensenada, Los Cabos, Ciudad Juárez, Chihuahua, Tamaulipas, Torreón, Salamanca, Colima, Aguascalientes, Puebla, Tlaxcala, Xalapa, Mérida, Cancún y un gran número más de ciudades en todo el país.
9 de marzo #un día sin nosotras
Pero este año la lucha no se queda aquí, organizaciones han llamado a un paro general de mujeres. Bajo la consigna: Ni una mujer en las calles; ni una mujer en los trabajos; ni una niña en las escuelas; ni una joven en las universidades; ni una mujer comprando; se está llamando a visibilizar lo indispensable que son las mujeres y los efectos de su falta de participación.
La respuesta a la convocatoria iniciada por la colectiva Hijas del Mar de Xalapa, ha sido sorprendente y no han faltado instancias públicas, empresas, partidos políticos y personajes políticos que hayan aprovechado la oportunidad para asegurar apoyar la lucha de las mujeres.
Las feministas han invitado a la sociedad a mantenerse alerta de estos actos de oportunismo, pues aseguran que partidos conservadores o instancias como el ejército mexicano no pueden asumirse feministas, pues no apoyan la agenda de derechos de las mujeres y son cómplices de las violencias ejercidas contra ellas.

Sin duda es un momento histórico para las mujeres en México y aunque es motivadora la solidaridad social, será necesario que todas las personas se comprometan a exigir al estado que garantice los derechos de las mujeres y que imparta justicia. Pero también deberemos comprometernos a hacer los cambios necesarios en nuestras vidas, pensamientos y actitudes para dejar de fomentar violencias machistas y la ideología patriarcal.